El pasado miércoles, un turista tomó contacto con CODEFF desde la playa de Mure, en cercanías de Cobquecura, informando que había encontrado una cría de lobo marino varada en la orilla.
Producto de nuestra trayectoria como ONG ambientalista, trabajando hace más de 30 años en el rescate, a través de voluntariados, de lobos, CODEFF está en la memoria colectiva de los residentes, quienes con cierta frecuencia nos contactan por emergencias como esta.
Gracias a la permanencia de CODEFF en el comité de gestión del santuario y en especial, por tener un convenio de colaboración con SENAPESCA, a quienes se transfirió inmediatamente el llamado de alerta, el turista tuvo asistencia remota mientras se trasladaba personal del servicio hasta la playa de Mure.
Una vez en terreno, el personal de SERNASPESCA pudo constatar que se trataba de una cría de lobo fino. Cubren grandes distancias y, por tanto, es seguro que se detuvo a descansar, porque estaba en buenas condiciones de salud.
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Sobre el hecho, la coordinadora de trabajados voluntarios de CODEFF en Cobquecura, Constanza Núñez, comentó que, “habíamos visto casos con adultos solteros enfermos o expulsados que se alejan de sus colonias, pero es la primera vez que me toca ver el caso de que una cría tan pequeñita que se desplaza errante y solitaria por las costas”.
Tras la revisión por parte del servicio, Núñez confirmó que, “por las fotos y según nos informó SERNAPESCA, se ve que estaba en una buena condición de salud y a pesar que no estaba junto a su madre, por su aspecto podemos presumir que ya se sabe alimentar bien por sí misma y eso nos deja mucho más tranquilos de que sobrevivirá”.
Tras mantener al público alejado para que pudiera descansar en tranquilidad y retomara fuerzas, poco antes del atardecer la cría volvió al mar por sus propios medios y retomó su viaje.
Este final feliz fue gracias a que le persona nos contactó y pudimos derivar a tiempo la asistencia de personal de SERNAPESCA. A diferencia de esta linda historia, en la larga experiencia que CODEFF tiene también nos han tocado experiencias menos afortunadas, donde por la mala conducta de algunas personas los lobos o pingüinos han terminado muertos.
Algunos de los errores frecuentes en estos casos son: intentar darles agua o alimentos, devolverlos al mar, sacarse selfies, dejar que los perros le ladren cerca o sean atacados, entre otros.
Es por esto que desde CODEFF hacemos un llamado a tener una conducta respetuosa con la fauna y no hostigar a los ejemplares que varan, salen a descansar o realizar otras actividades a lo largo de nuestra costa. Ante cualquier situación como esta, llamar al 800 320 032 o al 137 de la Armada de Chile, pero siempre a personal especializado.
