- La Asociación de fabricantes de automóviles ANFAC ha denunciado ante la Comisión Europea el proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética del Govern balear.
- Sin embargo, Baleares tiene graves problemas de contaminación atmosférica, además de ser un territorio particularmente sensible al cambio climático y con limitaciones de espacio.
- Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/Birdlife y WWF criticamoso la postura de ANFAC y piden a los fabricantes que se comprometan con el cambio climático y se adapten a las nuevas tendencias de movilidad.
El pasado miércoles 16 de enero, la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles, ANFAC, presentó ante la Comisión Europea una denuncia al proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética del Govern Balear.
Este proyecto incluye la medida de prohibir la circulación por las islas de vehículos con motor diésel en 2025, y la circulación del resto de los vehículos de combustión interna a partir de 2035, aunque solo afecta a los vehículos no radicados en la región isleña. La Presidenta del Govern, Francina Armengol, ha recordado este martes, en respuesta a una pregunta parlamentaria de Gabriel Company (PP), su compromiso con la lucha contra el cambio climático y con la continuidad de la tramitación de la ley.
Las principales organizaciones ecologistas, Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF, defendemos esta medida, que consideramos esencial para la descarbonización del transporte. Recordamos, no obstante, que el Govern Balear debe comprometerse con medidas que disminuyan el transporte privado y no fomentarlo, como ocurre en proyectos como la autopista Llucmajor-Campos.
Consideramos que, al contrario de lo que ha expuesto ANFAC, Baleares tiene problemas serios de contaminación atmosférica. De hecho, tal como queda recogido en el informe de calidad del aire de Ecologistas en Acción, es una de las regiones más afectadas por concentraciones de ozono troposférico, en parte generado por el tráfico rodado. Además, algunas zonas de Palma están afectadas por altos niveles de dióxido de nitrógeno (NO2) derivado del tráfico.
En las islas se da también un problema de espacio físico para albergar a los vehículos llegados en la temporada turística. Esta situación es la que ha llevado a la aprobación el pasado día 29 de enero de una Ley que prohíbe la entrada de vehículos a motor en la isla de Formentera en determinados periodos.
Baleares y el cambio climático
El principal objetivo del proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Ecológica es la lucha contra el cambio climático. Un problema que afecta particularmente a Baleares, donde un aumento de un metro en el nivel del mar a finales de siglo podría hacer retroceder la línea costera hasta 13 metros, destruyendo zonas residenciales y centros turísticos enteros. Por otro lado, dada la proyección internacional de las islas, un compromiso ambicioso con el cambio climático sería un revulsivo para muchos otros países.
Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/Birdlife y WWF recordamos que las medidas para lograr eliminar los vehículos de combustión interna no son exclusivas de Baleares, sino que otros países de nuestro entorno como Holanda, Suecia, Noruega, Dinamarca, Irlanda, Reino Unido y Francia tienen planes similares.
Estos mismos países son el origen de las millones de visitas de turistas al archipiélago cada año y sus expectativas al visitar Baleares incluirán cada vez más acceso a transporte público de calidad y vehículos de alquiler libres de emisiones.
La medida de prohibición de circulación de vehículos diésel a partir de 2025 es asimismo coherente con la baja proporción de vehículos diésel en las islas, de tan solo un 34%, comparada con el 60% del resto del Estado.
Además, según los datos del informe anual de ANFAC, el 81% de los vehículos fabricados en España se exportan, casi siempre a países de la UE, en los que hay una creciente demanda de una movilidad más sostenible a la que ANFAC deberá adaptarse.